La disminución en los números de contagios de COVID-19 se ven reflejados en las unidades de cuido intensivo, la ocupación está en un 75%.
Risaralda baja la alerta hospitalaria de roja a naranja luego de 80 días consecutivos con una ocupación de UCI superior al 80%, lo que permitirá realizar algunos procedimientos no urgentes.
«Esta decisión permitirá volver a retomar unas actividades médicas, quirúrgicas y hospitalarias» dijo el secretario de Salud, Javier Darío Marulanda.
La asignación de Camas UCI e Intermedios será responsabilidad de los prestadores; sin embargo, no podrán modificar la oferta instalada en cuidado crítico para pacientes COVID y No COVID.
Los pacientes remitidos de otros departamentos deberán contar con autorización previa de la autoridad sanitaria a través del CRUE para ser internados
