Payton Gendron tenía tres armas en su casa. Su propio padre se las había regalado, pero no creía que su hijo fuese capaz de cometer una masacre
La policía de Nueva York entregó detalles de la investigación sobre el tiroteo en un supermercado en Buffalo. El atacante habría planeado la brutal escena hace un año.
Payton fue remitido en 2021 a un análisis psiquiátrico, por contarle a una maestra que después de su graduación su propósito era asesinar a muchas personas y luego suicidarse.
Las autoridades jamás pensaron que lo que el joven había confesado representara un riesgo. Sin embargo, tres meses antes del tiroteo, visitó el establecimiento en Buffalo y habló con una empleada blanca del supermercado.
En esa ocasión, le dijo que ella era blanca y que debía vivir en un lugar rodeada de gente de su color. “Tú no perteneces a este lugar”, dijo el joven.
Payton vivía junto a sus padres y dos hermanas menores. Sus vecinos aseguraron que era un joven bastante tímido.
La policía halló un manuscrito de 180 páginas donde habría descrito cómo iba a ejecutar la masacre. En el libro, que él mismo escribió, explicaba desde cómo iba a utilizar el chaleco antibalas, el por qué llevaría una cámara en su casco y cómo les dispararía a todas sus víctimas.
Payton se declaró inocente en la corte. Dijo creer en la teoría del reemplazo, que asegura que los judíos quieren reemplazar a los estadounidenses blancos con trabajadores negros y latinos.
Una operadora del 911 fue suspendida de su trabajo por colgar el teléfono luego que un empleado hiciera una llamada, mientras susurraba para explicar lo que sucedía.
