El padrastro y la madre del menor confesaron que cometieron el crimen porque el bebé era un obstáculo para iniciar su nueva vida
El torso y la cabeza del niño fueron encontrados entre los matorrales y una vivienda abandonada. Los mismos ciudadanos fueron quienes denunciaron ante las autoridades el macabro hecho.
Sucedió en la provincia de Tayacaja, en la región Huancavelica en Perú. La mujer relató que la razón por la que acabó con la vida de la pequeña criatura era para viajar a la selva peruana para iniciar su “nueva vida”.
La responsabilidad recayó en la madre, Elvira Salvatierra Contreras de 21 años y su pareja, Pacco Montes Urbano de 56 años. Puesto que ellos no denunciaron el atroz hecho y habían desaparecido sin dejar rastro alguno el 6 de septiembre.
El padrastro del menor tiene antecedentes por el delito de violación sexual y recién había salido de prisión, además, contó que habían desaparecido el niño porque “era un estorbo” para la nueva vida que querían.
Luego que la mujer fuera capturada, relató a las autoridades que lo había asfixiado con la camisa hasta matarlo. Luego, llevo el cuerpo a una vivienda abandonada y con un cuchillo desmembró el pequeño cuerpo del menor de 3 años.