Según Jaime Gutiérrez, asesor nacional de la Confederación de Acción Comunal en temas de Derechos Humanos y Paz, integrantes de la organización criminal Cordillera estarían aprovechando las invasiones “para hacer sus trabajos de distribución de sustancias psicoactivas”.
La proliferación de terrenos invadidos entre los municipios de Pereira y Dosquebradas viene creciendo a ritmo acelerado, agregó Gutiérrez.
“Inclusive esto se ve en propiedades de la CARDER”, aseguró el promotor de derechos humanos.
El líder comunal explicó que las invasiones actualmente sirven a grupos delincuenciales para esconderse cuando cometen algún delito.
A pesar de que existen pruebas, según Gutiérrez, las autoridades no intervienen en estas zonas «y cuando lo hacen ponen en evidencia a quienes denuncian», agregó.
«Ese es el caso puntual en La Pesebrera, en Dosquebradas y en la Avenida del Río, que es una zona de fácil acceso y estratégica para esconder a los delincuentes, los campaneros tienen una mejor visibilidad para avisar, esto lo convierte en un sector con mayor presencia de bandas», puntualizó.