Siete alcaldes del departamento han sido amenazados, lo que representa la mitad de los mandatarios locales, y un diputado denunció intimidaciones. Ante este panorama, la Gobernación pidió al Gobierno Nacional mayor acompañamiento y refuerzo en las medidas de protección.
Los municipios afectados son Pueblo Rico, Mistrató, Belén de Umbría, Quinchía, Guática, La Virginia y Santa Rosa de Cabal. La situación generó alarma entre las autoridades locales, quienes expresaron la urgencia de fortalecer las garantías para el ejercicio político en la región.
Durante un consejo de seguridad, las autoridades escucharon a los mandatarios y anunciaron gestiones ante entidades nacionales con el fin de lograr un respaldo más amplio en materia de protección.
El gobernador de Risaralda Juan Diego Patiño y el presidente de la Asamblea, Pablo Giordanelli, coincidieron en señalar que la amenaza contra líderes políticos se agudizó en las últimas semanas, en medio de la presencia e intentos de incursión de integrantes del Clan del Golfo y disidencias de las Farc en el departamento.






