Paso varios días en cuidados intensivos. Hoy ya está caminando y espera por la ayuda que puedan brindar todos los colombianos
Lo que le pasó a Matías Uribe le puede pasar a cualquiera. Mientras su abuela lo cuidaba, sufrió un terrible accidente en la cocina, pero hoy su familia pudo contar la historia con más optimismo.
“Mi mamá estaba cocinando un chicharrón. Cuando lo fue a bajar de la estufa, el niño estaba detrás de ella, la tropezó y le cayó el aceite encima”.
Así de trágico fue el relato de Karen, la hermana mayor de Matías. El terrible accidente se produjo el 21 de diciembre en Villa Santana, una de las comunas más pobladas de Pereira.
Es una familia de bajos recursos. Víctimas de las desigualdades sociales que hoy vive el país, pero con un amor inmenso hacia este angelito.
“Mi mamá me llamó y me dijo el niño se quemó”. Karen contó que lo que nunca imagino es que las quemaduras eran tan graves.
Lo llevaron hasta el hospital Santa Mónica, en el municipio de Dosquebradas. De allí lo remitieron al Hospital Universitario San Jorge, en Pereira. Pero el 23 de diciembre dijeron que el estado del niño era crítico y lo trasladaron a Bogotá.
Matías pasó ocho horas en quirófano. Le quitaron piel de sus piernas para injertarle en otras partes del cuerpo y hasta estuvo varios días en coma.
Un consentimiento le hicieron firmar a sus familiares, debido a que las esperanzas de vida eran mínimas. “Nosotros jamás abandonamos la idea de que el niño iba a recuperarse. Sabíamos que Diosito nos iba a hacer el milagro”, dijo su hermana.
El pequeño Matías sigue internado en un centro médico en Bogotá. La recuperación será larga, pero ya salió del coma y hasta camina.
Pero la familia del niño es de bajos recursos y no cuenta con la capacidad económica suficiente como para costear el tratamiento del niño.
Por eso acudieron a este medio para pedirle a las personas de buen corazón que les ayuden para completar el proceso de recuperación de este angelito de cinco años.