Una joven de 17 años falleció tras ingerir un pastel envenenado con arsénico que le fue entregado en su vivienda, junto a una carta con un mensaje romántico presuntamente enviado por un admirador.

La víctima, identificada como Ana Neves, recibió el obsequio a través de un domiciliario. Junto al pastel venía una nota que decía: “Un regalo para la chica más hermosa que he visto en mi vida.” Convencida de que se trataba de un gesto de un pretendiente, Ana consumió el pastel.

Horas después comenzó a presentar fuertes síntomas gástricos y fue trasladada a un centro asistencial en Oliveira en Itapecerica, Brasil, donde recibió atención médica. Aunque fue dada de alta inicialmente, su estado de salud se agravó, y poco tiempo después falleció a causa de un paro respiratorio. La autopsia reveló que la joven había sido envenenada con arsénico.
La investigación permitió identificar al repartidor, quien brindó información clave sobre el remitente del paquete. Con esos datos, las autoridades capturaron a otra adolescente de 17 años, quien resultó ser la mejor amiga de la víctima.
Durante el interrogatorio, la menor confesó haber enviado el pastel envenenado. Afirmó que su intención no era matar a Ana, sino únicamente “asustarla”. Según su testimonio, el crimen habría estado motivado por celos y envidia.
El caso ha conmocionado a la comunidad, mientras las autoridades continúan el proceso judicial para esclarecer todos los detalles de esta trágica historia.