En los últimos meses, ha crecido alarmantemente el número de aplicaciones de préstamos en dispositivos móviles. Aunque pueden desembolsar créditos, es probable que esto se convierta en un dolor de cabeza.
Se trata de una nueva modalidad de «extorsión cibernética», donde engañan al usuario con altas sumas de crédito a tasas de interés muy bajas y fechas flexibles. Sin embargo, una vez tomado el préstamo, las aplicaciones exigen pagos antes de la fecha estipulada y hasta el doble del dinero solicitado. Si el usuario hace caso omiso a estos cobros, la aplicación empezará a enviarle mensajes masivos a su WhatsApp desde diferentes contactos con amenazas e intimidaciones. También escriben a todos sus contactos usando fotos de su galería y poniendo un aviso de «estafador», y no dejan de hacerlo hasta que se pague el crédito.
Estaos aplicativos logran acceder a su información por medio de los permisos requeridos al instalarlas. Normalmente, las aplicaciones de estafas piden acceder a su almacenamiento, sus contactos, su ubicación e incluso hasta sus llamadas, su cámara y su micrófono. Una vez con estos datos, cientos de personas que trabajan para estos proyectos los usan para extorsionar y sacar mucho más dinero.
Tras muchas denuncias, algunas de estas aplicaciones han sido clausuradas o prohibidas. Sin embargo, estas compañías crean empresas fachada y múltiples aplicaciones con diferentes nombres, lo que las convierte en un verdadero riesgo en internet.
En los casos más extremos, algunas de estas apps conceden préstamos sin el consentimiento del usuario, depositándole dinero sin pedirlo y exigiendo altas sumas de intereses al cobrar. También utilizan sus datos personales para hacer fraudes cibernéticos o suplantaciones de identidad. Incluso personas que denuncian estos modelos de estafa han recibido amenazas de muerte por parte de los agentes de estas apps.
Ante la creciente proliferación de aplicaciones de préstamos dudosas, es esencial mantenernos informados y vigilantes. La conveniencia de solicitar créditos a través de apps no debe cegarnos ante los riesgos que conlleva. Es crucial verificar la legitimidad y confiabilidad de las empresas financieras antes de proporcionar nuestros datos personales y acceder a sus servicios. Además, es recomendable leer detenidamente los términos y condiciones, así como las políticas de privacidad de estas aplicaciones. La prevención y el conocimiento son nuestras mejores armas para protegernos de la extorsión cibernética y preservar nuestra seguridad financiera en un mundo cada vez más digitalizado.
