Gian Marcos Aguirre, joven de 20 años, debía ser atendido en una clínica de Pereira para su cirugía; sin embargo, no había reserva de sangre para él

Luz Marina Aguirre, madre del joven, denunció a Noticias UNOA sobre las dificultades para la cirugía de su hijo, quien sufre de un tumor cerebral y cuya salud se deteriora con el paso de los días.

Todo había empezado desde el 10 de octubre, día en que había recibido la vacuna contra la COVID-19; a los dos días empezó a sufrir una pérdida de visión y audición, por lo que tuvo que ser remitido a un centro de salud el sábado 16.

Estuvo en una de las clínicas de la ciudad hasta el 22 de octubre, día en el que ordenan la hospitalización desde casa para Gian Marcos; sin embargo, una primera denuncia de la madre radicó en que nunca le hicieron seguimiento. «Solo aparecieron una vez para hacerle una prueba de COVID», aseguró Luz Marina.

De acuerdo con la madre, se le debía hacer una cirugía para el 27 de noviembre. Se le había pedido una reserva de sangre para realizar con cabalidad el procedimiento médico.

«Llevamos ocho bolsitas de sangre, de las cuales nos recibieron seis. De repente nos dijeron que no pueden hacerle la cirugía porque no había reserva de sangre. ¿Dónde está?», denunció la mamá de Gian Marco.

Hubo evidencias de personas que donaron sangre para el joven. Uno de los casos es de Andrea Gallego. «Fui a donar sangre para él, pero nos dicen que se perdió; de esta donación no me dieron certificado», afirmó a través de un video.

El mismo caso fue para Geraldine Ospina, quien donó el recurso vital para Gian Marcos. «La sangre se había perdido y nadie responde», dijo Luz Marina.

El caso fue notificado a la Personería Municipal. «Me dicen que si llega un paciente desangrándose, deben utilizar esa misma sangre para él», dice Luz Marina, quien clama para que su hijo, por fin, pueda ser operado.

adesnce