El barrio Evaristo Sourdis de Barranquila fue el lugar del macabro hallazgo. Un niño fue encontrado sin vida con muestras de violencia en su cuerpo.
El menor de 11 años fue encontrado por su tío Luis Sequeda, cuando entró a la casa donde residía el menor y se encontró con la tétrica escena. Su sobrino estaba en la cama, con una herida profunda en la frente y hematomas en su cuerpo.
«Yo no tenía llaves para entrar a la casa, pero los vecinos nos avisaron que estaba cerrada desde hace rato y como fuera teníamos que entrar. Lo vimos acostado con una toalla en la cara. Mi hija y mi esposa empezaron a gritar, pedimos ayuda a los vecinos, en ese momento pasaba una patrulla y llegó», agregó su tío.
La familia señala a Javier Segundo Fernández Hernández como el principal sospechoso ante el crimen, era su padrastro y quien estaba al cuidado del menor después de que su madre se fuera de viaje.
«El niño prefirió quedarse con él antes que con alguno de nosotros. Él lo trataba bien, lo mantenía y hasta le dio un celular, pero mi esposa sí sospechaba de él y le decía a mi hermana que no lo dejara solo porque era un desconocido», añadió Sequeda.
Los vecinos aseguraron que Fernández Hernández salió desde el medio día del martes con una maleta y desde ese momento jamás volvió.