Luego de las medidas anunciadas por el gobernador de Risaralda para prevenir el aumento de contagios en el departamento, que en los últimos dos días superó los 1.200 nuevos casos, el alcalde de Pereira se mostró abiertamente en ‘desacuerdo’ con las restricciones entre las que se cuentan el toque de queda desde las 9 de la noche, dos horas antes que lo ordenado el viernes pasado por los alcaldes del Área Metropolita en conjunto con el de Santa Rosa.
A través de un comunicado oficial, Carlos Alberto Maya, reconoció el aumento de casos Covid-19 y la disminución de la disponibilidad de UCIs en el departamento, sin embargo, explicó que la mayoría de contagiados ya se ha recuperado y la letalidad está por debajo del promedio nacional.
Frente a las Unidades de Cuidados Intensivos, Maya cree que faltó una reacción más oportuna por parte de las autoridades de salud «La verdadera estrategia para recuperar disponibilidad y no colapsar la red hospitalaria era iniciar con la suspensión de las UCIs por otras patologías no urgentes, como se hizo en el mundo entero, decisión que no tomó en su momento la Secretaría de Salud Departamental».
La inconformidad del alcalde pereirano frente a las medidas del gobernador es más notoria en aspectos como el control de las multitudes y la protección de los abuelos. «Las aglomeraciones del día no se atacan en la noche. Restringir la movilidad de los Adultos Mayores es inconstitucional. El Pico y Cédula debería exigirse solo donde haya aglomeraciones (…) El remedio saldrá más peligroso que la enfermedad». Expresó Carlos Maya.
Finalmente, el mandatario de la capital risaraldense dejó clara su posición frente a las medidas que él sí considera pertinentes. «sí a la ley seca. Sí a la restricción de acceso de visitas a centros de Adulto Mayor, hospitalarios y penitenciarios. Sí a la limitación de ocupación en el transporte público. Sí al pico y cédula en establecimientos de comercio. Sí a la prohibición de consumo de licor en espacios públicos. Sí al toque de queda desde las 11:00 p.m. el 24, 25, 31 de diciembre y 1 de enero».